sábado, 27 de octubre de 2012

Las sondas para tormentas del cinturón de radiación

30 de agosto de 2012: Desde los albores de la era espacial, quienes planean las misiones espaciales han tratado de seguir una regla simple pero importante: No acercarse a los cinturones de Van Allen. Las dos regiones con forma de rosquilla, ubicadas alrededor de la Tierra, están repletas de "electrones asesinos", ondas de plasma y corrientes eléctricas peligrosas para los viajeros espaciales y sus naves. Permanecer allí no es una buena idea.
Pero esas antiguas reglas quedaron atrás.  La NASA ha lanzado dos sondas espaciales directamente hacia los cinturones de radiación; y esta vez planean dejarlas allí durante un tiempo.


RBSP (splash)
 
 Un nuevo video ScienceCast explora los misterios de los cinturones de Van Allen. Haga clic aquí para ver el video
Las sondas para tormentas del cinturón de radiación (RBSP, por su sigla en idioma inglés), de la NASA, fueron lanzadas desde Cabo Cañaveral el 30 de agosto de 2012. Completamente abarrotadas de sensores, las sondas espaciales fuertemente protegidas dieron inicio a una misión de dos años y tienen como objetivo descubrir qué es lo que hace que el cinturón de radiación sea tan peligroso y tan endemoniadamente impredecible.
"Sabemos de los cinturones de Van Allen desde hace décadas y sin embargo continúan sorprendiéndonos con sus inesperadas tormentas de 'electrones asesinos' y otros fenómenos", dice el científico de la misión David Sibeck. "Las sondas para tormentas nos ayudarán a entender qué es lo que está sucediendo allí afuera".


RBSP (instruments, 200px)
 
 Cada una de las dos sondas para tormentas está repleta de sensores que cuentan las partículas energéticas, miden las ondas de plasma y detectan la radiación electromagnética. Haga clic aquí para ver más información en idioma inglés
 
Cuando los cinturones de radiación fueron descubiertos, en 1958, desafiaron las ideas ortodoxas que se tenían en esa época.  La mayoría de las personas asumía que el espacio alrededor de la Tierra estaba vacío. El primer satélite estadounidense, el Explorer 1 (Explorador 1, en idioma español), demostró lo contrario.  La pequeña sonda espacial estaba equipada con un tubo Geiger para contar los protones y electrones energéticos.  Al viajar alrededor de la Tierra, el Explorer 1 encontró tantas partículas cargadas que el registro del contador estuvo fuera de la escala casi todo el tiempo.
En la década de 1950, los cinturones de radiación tenían muy poco efecto sobre la gente común. En la actualidad, son cruciales para nuestra sociedad, que hace tanto uso de la tecnología.   Cientos de satélites que se usan para todo, desde la predicción de las condiciones del tiempo hasta los GPS (Global Positioning Systems, en idioma inglés, o Sistemas de Posicionamiento Global, en idioma español) o la televisión, de manera rutinaria rozan los cinturones, exponiéndose de este modo a partículas energéticas que pueden dañar los paneles solares y causar cortocircuitos en aparatos electrónicos sensibles.   Durante las tormentas geomagnéticas cuando los cinturones están agrandados por la actividad solar, importantes cantidades de satélites pueden ser tragados poniendo así en peligro a la tecnología que utilizamos en la vida cotidiana aquí en el planeta, que se encuentra debajo.
"Las sondas para tormentas del cinturón de radiación abordan directamente estos problemas que tenemos aquí en la Tierra", dice Lika Guhathakurta, quien es la científica principal del programa de la NASA denominado "Viviendo con una Estrella". Dicho programa está a cargo de la misión. "Las RBSP son una mezcla única de ciencia pura y aplicación práctica".
Uno de los grandes misterios de los cinturones de radiación es la forma loca en la que reaccionan a las tormentas solares. "Casi cualquier cosa puede pasar", dice Sibeck.
Cuando una nube de tormenta que proviene del Sol golpea los cinturones de radiación, normalmente reaccionan de manera contraria a la intuición.  Una posible reacción es que los cinturones de radiación se llenen de partículas energéticas, tales como los potentes "electrones asesinos" que preocupan a las personas que planean la misión.   De cualquier modo, precisamente lo opuesto también sucede.   Una tormenta solar puede provocar que los cinturones pierdan sus partículas asesinas, convirtiéndolos de manera temporaria en lugares seguros.   ¡Y, en algunas ocasiones, nada ocurre!   Los cinturones permanecen completamente sin cambios.

RBSP (unpredictable, 558px)
 
 Esta gráfica muestra cómo los electrones energéticos en los cinturones de radiación pueden reaccionar a las tormentas solares. Algunas veces, se incrementan, otras veces disminuyen y, en algunas ocasiones, no cambian en absoluto. La impredecibilidad es uno de los grandes misterios de los cinturones de Van Allen. [Más información
 
"El problema es que no hay una idea unificada de qué fenómenos son los más importantes dentro de los cinturones", dice Sibeck. En las conferencias científicas sobre el tema en las que participa, dice:   "Si hay 100 personas en una reunión, habrá 100 diferentes respuestas a la pregunta. ¿Cómo se energizan los electrones asesinos?  Algunos afirman que es debido a las ondas de plasma; otros apuntan a los choques con el viento solar; otros están a favor de la difusión. Y la lista continúa".
Los investigadores esperan que las RBSP restrinjan las posibilidades.  Durante las tormentas, las sondas pueden tomar muestras de los campos eléctricos y magnéticos, contar la cantidad de partículas energéticas y detectar las ondas de plasma de muchas frecuencias.  El funcionamiento interno de los cinturones de Van Allen será como un libro abierto para estas dos sondas espaciales, y proveerá datos para los modelos de predicciones que nos dirán cuándo es seguro ingresar en los cinturones, realizar caminatas espaciales y hacer funcionar aparatos electrónicos sensibles.
"Los cinturones de Van Allen son parte de nuestro hogar en el espacio", agrega Guhathakurta.  "Las RBSP nos ayudarán a aprender cómo vivir allí".
¡Basta de antiguas reglas!

lunes, 15 de octubre de 2012

Curiosity comienza a desplazarse a través del sitio de aterrizaje denominado Bradbury

22 de agosto de 2012: Curiosity (Curiosidad, en idioma español), el vehículo todo terreno, de la NASA, que está explorando Marte, ha comenzado a desplazarse desde su sitio de aterrizaje. Hoy, los científicos anunciaron que a dicho sitio lo llamaron Ray Bradbury en honor al fallecido autor.
Al hacer sus primeros movimientos sobre la superficie de Marte, Curiosity combinó el desplazamiento hacia adelante, hacia atrás y los giros. Esto logró colocar al vehículo explorador todo terreno aproximadamente a una distancia de 6 metros (20 pies) del sitio donde se posó, hace 16 días.

Bradbury Landing (splash)
 
 Esta imagen muestra las huellas del primer recorrido de prueba de Curiosity. El 22 de agosto de 2012, el vehículo explorador todo terreno realizó su primer desplazamiento. Se movió hacia adelante alrededor de 4,5 metros (15 pies), rotó 120 grados y luego dio marcha atrás aproximadamente 2,5 metros (8 pies). Curiosity está ubicado a una distancia de casi 6 metros (20 pies) del sitio en el cual se posó y al que ahora han llamado "Zona de Aterrizaje Bradbury". Crédito de la imagen: NASA/JPL-Caltech [Imagen ampliada y breve explicación] [Imágenes más recientes
 
La NASA ha aprobado el nombre que eligió el equipo científico de Curiosity para el sitio de aterrizaje en honor al influyente autor, que nació un 22 de agosto, hace 92 años, y que falleció este año. El lugar en el cual Curiosity se posó se llama ahora Zona de Aterrizaje Bradbury (Bradbury Landing, en idioma inglés).
"No fue una elección difícil para el equipo científico", dijo Michael Meyer, el científico del programa Curiosity, de la NASA. "Las historias que Ray Bradbury escribió para soñar con la posibilidad de que exista vida en Marte inspiraron a muchos de nosotros y a millones de otros lectores". [Ver video]

El desplazamiento que tuvo lugar hoy confirmó el "estado de salud" del sistema de movilidad de Curiosity y produjo las primeras huellas del vehículo explorador todo terreno en Marte. Esto quedó documentado en las imágenes que se tomaron después de este desplazamiento. Durante una conferencia de prensa, en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (Jet Propulsion Laboratory o JPL, por su sigla en idioma inglés), de la NASA, el cual se encuentra ubicado en Pasadena, California, Matt Heverly, quien se encargó de dirigir el desplazamiento del vehículo explorador durante la misión, mostró una animación que se confeccionó a partir del software de visualización que se utilizó para planificar el primer desplazamiento de Curiosity.
"Contamos con un sistema de movilidad que funciona con toda su capacidad y tenemos por delante muchas exploraciones sorprendentes", dijo Heverly.

Bradbury Landing (tire tracks, 200px)
 
 Vista de cerca de las primeras huellas que dejó Curiosity en Marte.
Curiosity pasará algunos días más trabajando al lado de la Zona de Aterrizaje Bradbury, realizando revisiones de instrumentos y estudiando los alrededores, antes de embarcarse hacia su primer destino ubicado aproximadamente a 400 metros (1.300 pies) en dirección Este-Sudeste.
"Curiosity es un vehículo mucho más complejo que los anteriores vehículos exploradores de Marte. Las actividades de prueba y de caracterización llevadas a cabo durante las semanas iniciales de la misión sientan bases importantes para operar nuestro precioso recurso nacional con el cuidado que corresponde", dijo el gerente del Proyecto Curiosity, Pete Theisinger, del JPL. "En dieciséis días, estamos progresando excelentemente".